lunes, 12 de septiembre de 2011

Ya empezó el curso

Pues no sólo he vuelto, sino que este año hay (o ha habido, pero no sé si seguirán) más novedades de las que me esperaba.
Para empezar desde el sábado (y seguramente hasta mañana) tengo compañera de piso, es una de las nuevas profes visitantes, que mientras encuentra piso y se muda, se queda aquí. Pero hoy ya ha encontrado piso, ha firmado el contrato y seguramente mañana se muda, así que tampoco es mucha novedad. Lo que sí, que como este año se me han ido Aitor y Paula, pues he tenido que empezar a socializar a machas forzadas, y oye, he socializado bien. Con deciros, que el sábado fuimos a ver un piso (en realidad, ella fue a verlo, yo sólo acompañaba, que me saqué un máster en búsqueda de piso el invierno pasado) y al final acabamos cerrando el Weindorf de Heilbronn, creo que os hacéis una idea.
Y ahora otra novedad, el viernes fui a recoger mi horario, y me dieron la nada despreciable cantidad de 27 clases a la semana; como mi contrato es de 23 clases semanales y no me pueden dejar a deber porque no sé si me puedo quedar más años, pues fui a protestarle al jefe de estudios; pero el jefe de estudios no estaba el viernes, así que la subdirectora me dijo que ya el lunes se lo dijera y que ya lo arreglaríamos como fuera.
Hoy he ido a hablar con él, y las cuatro horas que sobran son de una clase de español, que no se puede anular, porque a esos alumnos hay que darles español y no se pueden repartir entre otros grupos porque por su horario no les coincide la clase con ningún otro grupo; además, aparte de Mar (que también está haciendo dos horas de más) no hay otros profes de español, pues no se lo puede quedar otro profe. Así que le he propuesto que me quite las tres horas de inglés que tengo, que aunque sigue sobrando una hora pues me la pueden pagar como horas extra, aunque las pagan menos que las horas normales (por eso prefiero tener una hora extra a tener cuatro horas extra).
En fin a lo que iba que luego me lío. Normalmente eso de darles horas de más a los profes es muy normal en Alemania, lo que hacen es que al año siguiente les dan horas de menos para compensar, pero claro, como yo no sé si me puedo quedar, pues me las tendrían que pagar. Lo importante, que el jefe de estudios me ha dicho, que si me decido a hacer el Anpassunglehrgang (exámenes+seminarios+vistas a clase+ otras cositas para convertirme en profesor funcionario aquí en Alemania) la escuela me apoyaría totalmente y me ayudarían con lo que fuera.
Pero claro, ahora la pregunta es ¿quiero quedarme aquí para toda la vida?

Y es que para quedarme aquí necesito una razón de mucho peso; sí, un buen trabajo fijo, con una tasa de paro como la de España de más del 20% (tasa de desempleo juvenil de más del 46%, y sí, por ahora soy joven) es una buena razón de peso; pero claro, con mi familia en España, con casi todos mis amigos en España (más o menos), y con el hecho de que la mayoría de mis amigos de aquí no están para quedarse, una potencial soledad es también una buena razón de peso para no quedarme. Y es que mientras no encuentre a quien me moje la orejilla, quien me diga cosas bonitas por las noches, quien me aguante las tonterías que tengo por las mañanas (que no son pocas), qunie haga que los días de lluvia y frío merezcan la pena... mientras no nos encontremos, me seguirá saliendo más a cuenta comenzar de nuevo cada septiembre, y que la novedad compense el estar lejos de casa.

7 comentarios:

Inma dijo...

si te quedas allí me voy contigo. Porque lo que es aki ta mu malita la cosa. Muchos besos y ánimo con la decisión que tomes.

Jumy Elerossë dijo...

Macho, si es que tal y como está la cosa lo más probable es que terminemos todos allí...

José Alberto dijo...

Y ese último párrafo, Antoñín? La llamada de la jungla?

afra dijo...

Sí, la jungla llama, y de vez en cuando dejo que mis hormonas escriban por mi :-P

Anónimo dijo...

Escucha las prioridades que te grita el corazón, pero no dejes que esos gritos disimulen los de las tripas. Que uno tiene que comer todos los días y es fácil acordarse más de los amigos que de las lentejas cuando se tiene la panza llena.

Santiago dijo...

Si haces el Anpassunglehrgang y el cole te apoya, se supone que te tendrías que quedar por los siglos de los siglos en ese centro o podrías moverte a otros sitios de Alemania?? La jungla llama, pero Berlín tb, no??? Oye, y cuál es la diferencia entre el Referendiarat y el Anpassunglehrgang??? He vuelto a tu blog, que lo tenía un poco olvidado!! un abrazo

afra dijo...

Morti, siempre tan práctica, pero tienes toda la razón del mundo. Además es pensar en el año que estuve en Córdoba estudiando oposiciones (si es que se puede llamar así) y se me olvidan todos los inviernos llenos de trabajo y me entran unas ganas locas de empezar el Anpassung a la de ya.

Santi, "por los siglos de los siglos..." es demasiado tiempo, además en esta vida sólo hay una cosa segura, y es que algún día se acaba. A otras partes de BaWü es seguro que sí me podría ir (otra cosa es que quisiera). Y Berlín (¡¡ay, mi querido Berlín!!) es una ciudad cuando eres estudiante, pero me da que es otra ciudad muy diferente cuando trabajas allí (que lo mismo es incluso mejor). El Anpassung es para que quienes ya estamos trabajando sin haber estudiado Lehramt en la universidad alemana nos podamos hacer funcionarios. Bienvenido de vuelta ;-) Un abrazo